El próximo 14 de enero Windows 7 dejará de tener soporte en Microsoft, por lo que no tendrá actualizaciones, ni parches de seguridad, por eso los que no actualicen sus equipos dejarán de estar protegidos contra problemas de seguridad, quedando vulnerables y expuestos.

Microsoft lleva muchos años intentando que los usuarios de Windows 7 a versiones más actuales, pero aun así hay millones de usuarios que aún no se cambian a versiones más actuales del sistema operativo. Dentro de esos millones de usuarios también se encuentran tanto equipos de consumo como empresas, según los informes de Kaspersky Windows 7 sigue siendo parte del 47% de las pequeñas y medianas empresas, dentro de los usuarios de consumo es un 38%.

Grandes corporaciones también han fallado en la actualización de sus sistemas, tal como el servicio de salud británico que cuenta con más de un millón de equipos con Windows 7 hoy en día. Compañías en esta situación pueden solicitar a Microsoft una ampliación de contrato de soporte para que sigan funcionando después del próximo 14 de enero. El costo va de los 25 USD anuales por acá equipo con Windows 7 que quieran extender.

En Redmond también han puesto en marcha un plan para incentivar la actualización de estos equipos hacia Windows 10, éste se llama FastTrack Center Benefit for Windows 10 y está disponible para aquellas empresas que compren por lo menos 150 licencias de Office 365 ProPlus o de Microsoft 365.

Microsoft por su lado decidió ofrecer actualizaciones de seguridad para Windows 7 sin costo adicional por un año para las empresas educativas que firmen un acuerdo concreto con Microsoft. Esta promoción termina el 31 de diciembre de este año. Disponible para clientes con Acuerdo de Empresa (EA) o con Subscripción de Acuerdo de Empresa (EAS) con suscripciones activas a Windows 10 E5, Microsoft 365 E5 y Microsoft 376 ES Security.